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En el extremo más auténtico del Valle de Arán, donde los bosques se funden con los prados alpinos y cada estación dibuja un paisaje distinto, se alza esta borda de nueva construcción de 140 m². Es una oportunidad excepcional para estrenar una vivienda que combina la arquitectura tradicional aranesa con el confort y las garantías de una obra nueva. Arquitectura y diseño interior El proyecto ha respetado al máximo la esencia de las bordas pirenaicas: fachadas de piedra y madera natural, cubiertas inclinadas y proporciones armoniosas con el entorno. Al entrar en la vivienda, uno se encuentra con un gran espacio abierto donde se integran la cocina y el salón. La cocina, moderna y funcional, se ha diseñado para convivir con la vida social del hogar: isla central, electrodomésticos integrados y acabados de calidad. El salón, con sus techos altos abuhardillados revestidos en madera, transmite una calidez especial; las vigas vistas y la luz natural que entra por los ventanales crean un ambiente acogedor durante todo el año, ideal para tardes de chimenea o reuniones familiares tras una jornada de montaña. La borda dispone de tres dormitorios amplios y luminosos, pensados para ofrecer descanso y privacidad. Dos baños completos equipados con materiales de primera calidad aportan funcionalidad y diseño. La distribución ha sido estudiada para aprovechar cada metro cuadrado, con zonas de almacenaje y circulaciones cómodas, consiguiendo una vivienda práctica para vivir todo el año o disfrutarla como segunda residencia. Espacios exteriores y entorno Uno de los grandes atractivos de esta propiedad es su terreno comunitario, un amplio espacio ajardinado que rodea la borda y que se ha concebido como una prolongación natural del paisaje. Aquí encontrarás zonas de césped, rincones para relajarte leyendo un libro y una barbacoa exterior para compartir comidas al aire libre con familia y amigos. Todo ello enmarcado por unas vistas impresionantes a las montañas y valles del Pirineo, que cambian de color según la estación: verdes intensos en primavera, flores silvestres en verano, ocres y dorados en otoño, y un manto blanco de nieve en invierno. El entorno de Bausen es, por sí mismo, un lujo. Este pequeño pueblo del Valle de Arán mantiene intacto su carácter tradicional, con calles empedradas y un ritmo de vida pausado que invita a la desconexión. Desde aquí puedes acceder a innumerables rutas de senderismo, practicar deportes de montaña y, a la vez, estar a pocos minutos de Vielha y de la estación de esquí de Baqueira Beret, uno de los destinos más prestigiosos de Europa. Confort y garantías de obra nueva Esta borda no solo enamora por su estética. Al ser obra nueva, ofrece todas las ventajas de la construcción moderna: aislamiento térmico y acústico de última generación, carpinterías de alta eficiencia energética, sistemas de climatización respetuosos con el medio ambiente y materiales seleccionados para garantizar durabilidad y bajo mantenimiento. Todo ello se traduce en un hogar confortable en cualquier época del año, con gastos energéticos optimizados y la tranquilidad de contar con las garantías legales propias de una vivienda de nueva construcción. Una inversión para disfrutar Estrenar una borda como esta en el Valle de Arán es mucho más que comprar una casa. Es asegurarse un lugar donde vivir experiencias inolvidables: desayunos frente a las montañas, noches de estrellas junto a la barbacoa, inviernos de chimenea y tardes de esquí, veranos de excursiones y baños en ríos cristalinos. Es también una inversión sólida en una de las zonas más demandadas del Pirineo, con un potencial creciente para el turismo de calidad y el alquiler vacacional.